lunes, 8 de noviembre de 2021

Apartar a los Traidores

 En Carabobo un grupo de vecinos y estudiantes me ha pedido unas palabras, hoy las comparto con ustedes. 

Usualmente siempre comienzo agradeciendo, hoy ese agradecimiento a los que están presentes lo acompaño con una disculpa por mi ausencia. 

Estoy ausente desde hace 4 años, en estas mismas fechas durante el año 2017, la opción que encontré para resguardar a mi familia y a mi mismo de la persecución y la represión, fue el exilio. 2017, sí. Aún guardo en la memoria aquel año, decenas de jóvenes, algunos tan jóvenes que la niñez aún se les notaba, convirtieron las calles en ríos humanos, su valentía y entrega se escucho en cada rincón del planeta, y por meses continuos, la protesta decidida, firme, multitudinaria y valiente fue la protagonista de nuestras vidas.

Tuve el honor de izar mi bandera junto a ellos, y nunca olvidare todo el sacrificio que ofrendaron en favor de conquistar la libertad.  A todos ellos hoy rendimos honores, el Carabobeño Daniel Queliz la segunda victima mortal de aquellas jornadas, a Leonardo Gonzalez el Dr Yaso, asesinado en Naguanagua por los agentes represivos de la dictadura, recordamos a Nehomar Lander, vaya ejemplo de gallardia  y patriotismo. 

Recordamos también a Óscar Pérez, Jose Pimentel, los hermanos Agostini, hombres de armas que asumieron su deber constitucional y pagaron hasta con su propia vida las consecuencias de su valor. Honores también para El Capitan Caguaripano, quien madrugó en Carabobo y recuperó las armas que estaban secuestradas por los narcos que se dicen gobierno. 

Pero a todos ellos, y a todos nosotros, nos traicionaron, a Caguaripano lo entregaron por ejemplo, una policía municipal de un alcalde que se decía opositor, se lo entregó a la inteligencia del dictador. A mi por ejemplo, me acusó por los medios del chavismo Feo la Cruz, señalándome de organizar la violencia y desatando la feroz persecución que derivó en mi exilio y en cárcel, allanamiento y saqueo para muchos de los integrantes de mi equipo. 

Pero la mayor traición, la más generalizada, fue que aún con la sangre de los más de 160 jóvenes asesinados recorriendo el asfalto, estos  que hoy de nuevo nos llaman a su festival electoral, en aquel mismo año, nos convocaron para elecciones regionales.  Hoy 4 años después hacen lo mismo, y son tan desvergonzados que ni siquiera alternan rostros. 

Nuestro deber, es rendir honores a los héroes, recordando el propósito que los llevo a la calle, nos llevo a la calle. Recordando esto, asumiendo que quede no quede vano el sacrificio y apartando de nuestra filas todo elemento vinculado a la traición, podremos ver el futuro, unir fuerzas, recuperar energías y librar las batallas necesarias, para recuperar la Venezuela que nos ha sido arrebata. Si este propósito gana terreno, estoy seguro, es mi compromiso, nos veremos en las calles librando la batalla definitiva, no será fácil, no será inmediato, pero sin lastres, sin traidores y con compromiso genuino, rendirle honor a nuestros compañeros caídos con una victoria, será más que posible. 

Nos vemos pronto 
Dios, Patria y Gloria. resistencia hasta la victoria 

Julio César Rivas
@JULIOCESARRIVAS